“Un par de semanas después de regresar de Australia, un compañero de equipo me llevó a un lado después de entrenamiento. Dijo que estaba preocupado por mi bienestar. Con una expresión perpleja le pedí más aclaraciones y me dijo que ya no me veía sonriendo, siendo como soy. Le aseguré que estaba bien. Ahora, mirando hacia atrás, realmente no lo estaba”.
Así abrió el mensaje en redes sociales Krystal Denis Lara para un anuncio importante.
“Apenas una semana después del año nuevo estaba liando con un intenso dolor de hombro. Un par de semanas después, me encontré viviendo de nuevo en casa de mis padres, yendo y viendo a médicos y haciendo resonancia magnética para descubrir qué estaba causando este dolor agonizante. Pronto descubrí que me habían diagnosticado artritis en el hombro acompañada de desgaste del cartílago”.
Con apenas 25 años, la nacida en Nueva York, aunque representante olímpica de República Dominicana, anunció su retiro.
“Muy rápidamente me di cuenta de que mi relación con la natación en los últimos meses se había convertido en algo con lo que no estaba contenta… casi odiaba. Otras partes de mi salud estaban empeorando independientemente de mi hombro, sabía que nunca quería volver atrás. Antes de ser una atleta, soy humana y necesitaba que mi bienestar físico y mental sanara. (…) “Me salí de mi zona de confort y cambié de carrera hacia las finanzas” (…)
Confesó Krystal Lara, la multimedallista en Juegos Boliviarianos y Juegos Centroamericanos y del Caribe que fue olímpica en Tokio 2020+1 (fue 27ª en 200 espalda; 35ª en 100 espalda).
“Tengo una fe inquebrantable en los nadadores jóvenes y talentosos de la República Dominicana, quienes se convertirán en los próximos líderes en deportes acuáticos. Espero haberlos inspirado a creer en sí mismos y perseguir sus sueños. Los récords están destinados a ser batidos, y espero ansiosamente el día en que la próxima generación supere mis logros. Pido disculpas por cualquier decepción que pueda haber ocasionado”.
“Estoy profundamente agradecido por el apoyo y ánimo que he recibido de todos durante mi carrera en la natación. Los últimos 20 años han sido una verdadera bendición, y agradezco a Dios todos los días por la familia que he encontrado dentro de la comunidad de natación de la República Dominicana y América Latina”.
“Que Dios los bendiga a todos”.