El chino Haiyang Qin ratificó su condición como rey de la braza, tras derrotar este viernes con claridad al británico Adam Peaty, el gran dominador de la especialidad pecho en la última década, en la final de los 100 de la prueba de la Copa del Mundo que se disputa en Berlín.
Qin, de 24 años, ya dominó en los Mundiales Fukuoka 2023, en los que el chino se convirtió en el primero en lograr el triplete tras colgarse el oro en la finales de los 50, 100 y 200 braza, esta última con nuevo récord del mundo incluido.
Esto, ante la ausencia del británico Adam Peaty, doble campeón olímpico de los 100 braza, que no acudió a la cita mundialista aduciendo problemas mentales.
Sin Peaty el chino no sólo logró un histórico triplete, sino que aventajó en la final de los 100 braza en más de un segundo al italiano Nicolo Martinenghi, campeón del mundo en 2022, al neerlandés Arno Kamminga y el estadounidense Nic Fink, que compartieron la plata con una marca de 58.72 segundos.
De nada le valió este viernes a Adam Peaty en la capital germana ser el más rápido en la salida, ya que al paso de los 50 primeros metros, el nadador chino, que cubrió el primer largo en un crono de 27.09 segundos, aventajaba en casi medio segundo -0.47- al británico.
Una diferencia que se disparó en el segundo largo, ya que si Qin volvió en 30.60 segundos para contabilizar un tiempo total de 57.69, la misma marca con la que logró el oro en Fukuoka, el británico Adam Peaty completó los últimos 50 metros en 32.29 para firmar un registro final de 59.85 segundos.
Tiempo que relegó a Peaty, ganador del oro en los 50 y 100 braza en los Mundiales de Kazán 2015, Budapest 2017 y Gwangju 2019, a la sexta plaza final, muy lejos del chino Qin que rebajó en 72 centésimas el récord de la Copa del Mundo que él mismo había establecido en las series de la mañana con un crono de 58.41 segundos.
Por detrás del nadador chino concluyeron los neerlandeses Arno Kamminga, plata con una marca de 59.01, y Caspar Corbeau, bronce con 59.27, mientras que el estadounidense Nic Fink, cuarto con 59.68, y el italiano Nicolo Martinenghi, quinto con 59.76, se quedaron fuera del podio.
Haiyang Qin no fue la única estrella de la primera jornada de la Copa del Mundo de Natación que se disputa en Berlín, donde brilló como pocos la australiana Kaylee McKeown que se impuso en la final de los 50 espalda con un tiempo de 27.24 segundos, nuevo récord de la Copa del Mundo.
McKeown, que como Qin logró el triplete -50, 100 y 200 metros- en los Mundiales de Fukuoka en espalda, rebajó en 11 centésimas el anterior récord de la competición, los 27.35 segundos que la china Xiang Liu, la plusmarquista mundial, firmó en agosto de 2019.
También sumaron triunfos con un nuevo récord de la Copa del Mundo la neerlandesa Tes Schouten, bronce en Fukuoka, se impuso en la final de los 200 braza con una marca de 2:22.13 minutos, y la neozelandesa Erika Fairweather, tercera en los últimos Mundiales, ganadora de los 400 libre con un crono de 4:01.09 minutos.
Fue la única capaz de bajar de los 24 segundos en la final de los 50 libre, tras imponerse con un tiempo de 23.95 a la australianas Cate Campbell, plata con 24.11, y Bronte Campbell, cuarta con 24.67, que regresaban a la gran competición internacional tras los Juegos Olímpicos de Tokio.
