Dejemos algo en claro. Una de las razones por las que nadamos y entrenamos, es para poder dar lo mejor de nosotros mismos en una competencia. Y lo mejor de competir, son las sensaciones que vivimos ese día. Aquí te dejo algunos de mis momentos favoritos durante una competencia:
- Afloje Este pequeño calentamiento al inicio del día, nos demuestra que la natación puede llegar a ser un deporte de contacto. Lo digo porque puedes llegar a pegarte sin querer con varias personas, e incluso descubrir moretones un día después ¡ouch!
- Traje de baño de competencia Es irónico que nos lleguemos a tardar más en poner nuestros trajes de baño para competir que lo que tardamos en nadar nuestra prueba. Por eso recuerda siempre tener bien calculado el tiempo que tardas en ponerte el traje y prevenir contratiempos para nadar tu prueba.
- Nervios Esa sensación de estar a punto de demostrar de lo que estás hecho da un toque especial a las competencias. Debemos saber controlarlos y no permitir que ellos nos controlen a nosotros.
- Oficialía El lugar donde más tensión se acumula entre nadadores ya que todos están con el mismo objetivo en mente mientras esperan a ser nombrados.
- Banco de salida Es ese momento mientras el nadador antes de ti está terminando de nadar su prueba. Escuchas el sonido de un silbato que indica que debes subir al banco seguido de un “A sus marcas… ¡BEEP!”
- Nadar Esta, evidentemente, es la mejor parte porque es una manera diferente de disfrutar nuestro deporte y que no experimentamos diariamente. Sentimos nuestro corazón latir a todo lo que da, e incluso nos quedamos sin aliento por todo el esfuerzo.
- Término de prueba Es el momento en el que volteas a ver el cronómetro y te das cuenta de que todo lo que has trabajado valió la pena.
¿Qué otro momento agregarías a estos 7? Nos leemos pronto.
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